¿Papá somos pobres?
Por Chuy Cruz
Eso fue lo que mi hijo cuando tenía 5 años me pregunto
cuando íbamos a su kínder, ¿Papá somos pobres?.
Estamos creciendo en un mundo en el cual usamos al dinero
como indicadores, y si usasmos esa métrica siempre vamos a sufrir pues siempre
existirá gente con más dinero que nosotros y aunque ganemos mucho dinero nunca
va a ser suficiente.
A su pregunta le respondí a mi hijo “Pobreza no es no
tener dinero, sino cuantos sueños rotos tienes, puedes tener muchísimo dinero,
pero no llevarte bien con tu esposa, con tus hijos, etc y posiblemente con eso
eres la persona más pobre del mundo”.
Seguí respondiéndole a mi hijo “nosotros somos ricos, y
no necesariamente por dinero, sino por amor, yo te amo, no me perteneces, no
soy tu dueño, son tu papá, no eres de mi propiedad”.
La riqueza real no es material.
Mi hijo me preguntó: ¿Entonces debo de trabajar para
ganar dinero?
El dinero es un resultado, le respondí, es la
consecuencia a que tú hagas lo que amas y sobre lo que tienes talento. Si tu
disfrutas y amas lo que haces vas a obtener dinero. Ganar dinero no es el
principal objetivo, y aunque les resulte curso y romántico, es la FELICIDAD.
Vivimos en un tiempo muy raro, donde compramos cosas que
no necesitamos, con dinero que no tenemos y para impresionar a personas a las
cuales no les interesamos.
Estamos bajo la cultura del micro ondas y los platos
desechables y así estamos convirtiendo nuestra vida, todo lo queremos rápido y
cuando ya no nos es de utilidad lo queremos votar, pero así no es la vida. La
vida está formada por momentos y por instantes, que no son a corto plazo, sino
a largo plazo. El resultado que queremos obtener en 10 años tiene que comenzar
en algún punto del tiempo, y ese punto es hoy.
Mi hijo me seguía preguntando, dada su inocencia y hambre
por respuestas, me dijo “Papá en la casa donde vivíamos en Torreón estaba más
grande que esta que tenemos en Aguascalientes” a lo que le respondí, hogar no
es una casa, un hogar es donde existe la familia amándose, así que nuestra casa
es igual o más grande pues está llena de amor.
Una vez un gran amigo me dio este consejo “Trata a tus
hijos como pobres (con un poco de frio y con un poco de hambre y sin todo lo
que quieres) y edúcalos como ricos (trabajar para dar y no para estirar la mano
en recibir algo)” es complicado pero no imposible.
Como padres queremos que nuestros hijos no sufran ante la
vida, pero eso no depende de nosotros, depende de ellos. He aprendido que yo no
soy lo que he vivido, soy lo que he aprendido y decidido. Si el día de hoy soy
un amargado, no es por lo que viví o decidí sufrir, sino fue por mis propias
elecciones y des aprendizajes.
Al final terminé mi charla con mi hijo diciéndole “Te repito
amado hijo, no somos pobres, somos ricos porque nos amamos, estamos juntos y
hacemos lo que amamos y al final del día nos pagan por disfrutar de lo que
hacemos, ¿esta padre no, Joshua? Con sus hermosos ojos me respondió que si. Cuando
seas más grande me ayudarás en mis cursos y conferencias para que veas como tu
padre es inmensamente feliz y disfruta lo que hace.
Gracias amigos por seguir leyendo mis artículos
Dios los llene mucho de bendiciones hoy y siempre y les
regrese en triplicado lo que le están deseando a los demás en este momento.
Dios no me des, ponme donde hay. Gente llegará y gente se
irá, pero todos habrán dejado una lección y aprendizaje en mi vida.
Saludos
Chuy Cruz.
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